Preguntas más frecuentes
La posibilidad de cultivar diamantes reales en el laboratorio y, por tanto, todo el proceso de producción de diamantes cultivados en laboratorio entusiasmó inmediatamente a los fundadores de Nevermined, pero ¿qué son los diamantes cultivados en laboratorio y de qué están hechos? ¿Cuáles son los términos correctos en la industria del diamante, qué procesos se utilizan para producirlos y qué criterios de calidad cumplen los diamantes cultivados en laboratorio? Respondemos a todas sus preguntas sobre nuestros diamantes.
¿Qué son los diamantes cultivados en laboratorio y de qué están hechos?
Mientras que los diamantes cultivados de forma natural se forman a lo largo de millones de años en el interior de la Tierra a partir de carbono sometido a altas presiones y temperaturas, los diamantes cultivados en laboratorio (LGD, por sus siglas en inglés) son creados por la mano del hombre en el laboratorio. En un entorno controlado, las "seeds" de diamante crecen hasta alcanzar el tamaño deseado en pocas semanas mediante tecnologías muy complejas. Los diamantes cultivados a partir de este proceso tienen las mismas propiedades químicas y físicas que los diamantes de mina. También están compuestos al 100% de carbono, alcanzan un grado de dureza de 10 en la escala de dureza de Mohs y a menudo incluso superan a sus homólogos naturales en los criterios de calidad 4C. Como no son en absoluto inferiores a las piedras extraídas (y, al contrario, incluso tienen algunas ventajas), los diamantes de laboratorio reciben de institutos reconocidos las mismas certificaciones que sus homólogos naturales.
¿Los diamantes cultivados en laboratorio son diamantes de verdad?
Sí, los diamantes cultivados en laboratorio son óptica, química y físicamente absolutamente idénticos a los diamantes de mina. No son imitaciones, sino diamantes auténticos. Se garantiza que los diamantes de Nevermined son exclusivamente diamantes cultivados en laboratorio cuyas propiedades son 100% idénticas a las de los diamantes cultivados de forma natural.
¿Cómo se reconocen los diamantes cultivados en laboratorio?
Los profanos no pueden distinguir a simple vista si un diamante ha crecido de forma natural o en un laboratorio. Incluso los expertos necesitan herramientas especiales para ello. La piedra preciosa cultivada puede identificarse por el grabado láser exclusivo en la barra redonda, es decir, en el borde de la piedra. La forma en que el carbono se ha incorporado al entramado del diamante también indica si la piedra se ha producido en un laboratorio o no. Los diamantes producidos mediante el proceso HPHT, por ejemplo, tienen una forma cristalina cuboctaédrica, mientras que los diamantes CVD se parecen más a un disco debido al material de partida. Por lo tanto, los diamantes en bruto obtenidos difieren en su forma de los diamantes naturales en bruto. Los diamantes de Nevermined a partir de 0,5 quilates siempre van acompañados de un certificado oficial de autenticidad de uno de los laboratorios más reconocidos del mundo, el GIA (Gemological Institute of America) o el IGI (International Gemological Institute).
¿Qué criterios de calidad cumplen los diamantes cultivados en laboratorio?
Las llamadas "4C" son criterios que definen la calidad y el valor de un diamante tallado. Se derivan de las letras iniciales de los criterios: Carat (quilate), Colour (color), Clarity (claridad) y Cut (talla). Los diamantes cultivados de forma natural siempre han sido evaluados según estos criterios y reciben el certificado correspondiente, por ejemplo de GIA o IGI. Como los diamantes cultivados en laboratorio son física y químicamente idénticos a los diamantes naturales, se evalúan según los mismos criterios. La única diferencia es que el certificado indica que se trata de diamantes cultivados.
¿Son más baratos los diamantes cultivados en laboratorio?
Los diamantes cultivados en laboratorio pueden venderse más baratos que los diamantes de mina, a pesar de ser de la misma calidad. Existen numerosas razones para ello. En primer lugar, la extracción de diamantes en minas o yacimientos a cielo abierto implica amplios procesos de extracción, elevados costes de mano de obra y una logística compleja. Por término medio, hay que mover más de 200 toneladas de tierra por 1 quilate de diamante de mina. Todo esto se elimina con los diamantes de laboratorio. Además, los diamantes procedentes de la producción en laboratorio casi siempre resultan de la categoría de pureza más elevada, que raramente se da en la naturaleza. Sólo el 1% de los diamantes extraídos de las minas tienen la calidad requerida por la industria joyera. En cambio, el proceso CVD permite ofrecer casi el 100% de las piedras para joyería exclusiva en condiciones controladas. Esto tiene un efecto muy positivo en el precio para los consumidores finales. Mientras que los diamantes de mina suelen justificar su elevado precio por su escasez y rareza, en Nevermined nos preocupamos exactamente por lo contrario: queremos contribuir a la democratización del lujo poniendo diamantes auténticos de la máxima calidad al alcance de los clientes de la próxima generación.
¿Tienen también desventajas los diamantes cultivados en laboratorio?
En comparación con los diamantes de mina, los diamantes de laboratorio tienen pocas desventajas. Sin embargo, creemos que es importante señalarlas: Los diamantes de mina todavía se utilizan a menudo como producto de inversión para preservar el valor en los espacios más pequeños. Esta función no se aplica (todavía) a los diamantes cultivados en laboratorio. Los diamantes cultivados también tienen una historia diferente a la de los diamantes de mina. Aunque la historia de los diamantes cultivados en laboratorio es éticamente más limpia, para algunas personas tiene valor el atractivo de llevar algo que ha sido moldeado por la propia naturaleza a lo largo de miles de años. A menudo se romantiza un lugar de origen exótico. Los diamantes de mina se enorgullecen de ser un recurso escaso, difícil de obtener y muy raro, lo que no ocurre con los diamantes de laboratorio, sino todo lo contrario. Queremos contrarrestar conscientemente este movimiento a favor del medio ambiente.
¿Por qué los diamantes cultivados en laboratorio son más sostenibles que los diamantes de mina?
La extracción de diamantes conlleva innumerables consecuencias negativas para el medio ambiente, problemas éticos y desafíos económicos. Para obtener diamantes naturales en minas a cielo abierto o subterráneas hay que remover toneladas de tierra, lo que puede provocar la erosión del suelo. En cambio, los diamantes cultivados en laboratorio no requieren la tala de selvas tropicales, la inutilización de tierras de cultivo ni la contaminación de los recursos hídricos. Los diamantes cultivados en laboratorio de Nevermined también producen menores cantidades de CO2 durante la producción y el transporte, dejando así una menor huella ecológica, y están completamente libres de condiciones de trabajo inhumanas o conflictos sociales. En resumen, la producción de diamantes en laboratorio puede evitar casi todas las influencias negativas de los diamantes de mina sin comprometer la calidad ni aumentar el precio.
Diamante de laboratorio frente a diamante de mina
La industria del diamante se ha enfrentado a graves retos durante muchas décadas. La extracción de diamantes ha estado y sigue estando asociada a conflictos sociales y éticos y a graves impactos medioambientales. Al producir diamantes en el laboratorio, en Nevermined podemos evitar todos los conflictos asociados a la extracción de diamantes.